“Rescatando espacios para el bienestar de nuestros hijos”

En esta ocasión queremos compartir con ustedes una acción emprendida por iniciativa de los vecinos de la comunidad de Hacienda las Delicias, quienes convencidos de la importancia trascendental que representa para todo niño el contar con un área de esparcimiento y recreación, se organizaron para la rehabilitación un pequeño parque ubicado dentro de su comunidad; con esta acción se pretende atender a la necesidad de contar con un espacio adecuado para los niños y un lugar de encuentro para la comunidad, fomentando con esto una mayor cohesión social.

“Rescatando espacios para el bienestar de nuestros hijos”

            No cabe duda de que uno de los mayores problemas presentes en la comunidad de Hacienda Las Delicias, en la ciudad de Tijuana, es la ausencia de espacios recreativos para los niños, más preocupante aun es el hecho de que los pocos que existen se encuentran en condiciones de abandono, e incluso algunos de ellos son utilizados como basureros, generando de esta forma un riesgo para los habitantes y sobre todo para los pequeños, que no pierden el deseo de darle la utilidad que originalmente deberían tener estas áreas.

            Conscientes de esta situación, los vecinos integrantes de la mesa de trabajo de espacios públicos se dieron a la tarea de crear un proyecto que surgió durante el mes de junio, cuyo objetivo principal fue el rescate y rehabilitación de un parque ubicado al final de una calle conocida con el nombre de “Calle Azul”. El proyecto tiene como meta beneficiar a todos los niños que habitan esta zona y sus alrededores, que fácilmente se pueden contar por cientos, así como a sus familias.

            De esta manera, gracias a la dedicación de los miembros de la mesa de trabajo, del tiempo y esfuerzo de los vecinos que se sumaron a este rescate, el apoyo recibido por la Delegación Presa Este y el valioso patrocinio de los comerciantes locales se pudo concretar este gran proyecto; al que se le dedicaron tres días de arduo trabajo. La limpieza del parque arrojó un resultado de 45 toneladas de basura recolectada, que pudo ser retirada gracias a la maquinaria aportada por la delegación. Se pintó el área de juegos infantiles para darle un mejor aspecto, además  se pintaron las bardas que rodean el área de juegos, utilizando una de éstas para crear el simbólico mural con las manos de los niños que viven a los alrededores y que utilizan este espacio como su sitio de recreación.

            El objetivo tanto de la mesa de trabajo como de los vecinos que aportaron su esfuerzo al proyecto no terminó ahí; todos pactaron la conservación del área de juegos y sus alrededores, procurar mantenerlo limpio.

Sin lugar a duda se logró que los vecinos generaran conciencia del hecho de que este tipo de espacios son fundamentales para el buen desarrollo integral de los pequeños; y que este tipo de acciones son parte importante para la convivencia y la relación entre vecinos que genera lazos de solidaridad más fuertes.